En la actualidad, PISA (Programme for International Student Assessment) es una de las
bases más sólidas sobre las que se pueden hacer juicios de valor respecto a los
sistemas educativos. Se basa en un modelo dinámico de aprendizaje a lo largo de la
vida centrado en lo que los jóvenes son capaces de hacer con lo que han aprendido
(tanto dentro como fuera del centro escolar), sopesando sus elecciones y tomando
decisiones.